
“Transformando con el corazón”.
La mujer actual es dinámica, perseverante, capaz, empática y soñadora. Demuestra una capacidad asombrosa para adaptarse a los cambios que la sociedad requiere y es apta para poder desempeñar distintos roles en nuestra sociedad, demostrando que el liderazgo femenino es una herramienta fundamental para la construcción y transformación de nuestro país.
Es para nosotros un honor presentarles a una mujer que simboliza las mejores virtudes de
la sociedad y que, además, tiene un inmenso amor por el bienestar de su gente. Ella es Rosy Urbina Castañeda, presidenta municipal constitucional de Tapachula, quien, en esta edición, nos demuestra que la voluntad por trabajar por el bienestar de un lugar, es una decisión propia, y que, si se quiere, se puede lograr cualquier cosa que uno se proponga, siempre y cuando, se ponga pasión, empeño, dedicación y corazón.

Rosy, bienvenida a la edición de junio, es un placer poder contar un poco de ti,¿cuál es tu historia familiar y cómo te describirías?
Soy la menor de 6 hermanos, y procedo de una familia trabajadora y unida. Siempre he considerado que ser la hija menor tiene recompensas, de niña y adolescente fui muy feliz y consentida por todos, pero al mismo tiempo me educaron para ser segura de mi persona y para ser una mujer de bien. Soy abogada de profesión y cuento también con una maestría en educación, lo que me permitió, en su momento, litigar e impartir cátedras de Derecho y de Filosofía. Afortunadamente, tuve la dicha de casarme con “mi buerito” el arquitecto Tomás Rubiera, un hombre maravilloso, quien siempre me ha apoyado y alentado a conseguir lo que me propongo. Desde hace 35 años formamos una feliz y amorosa familia conformada por 4 hijos: Alejandra, Tomás Gerardo, Javier Eduardo e Irene. Y ahora, la familia ha crecido gracias a la incorporación de mis dos hermosos nietos, Camila y Gael, y
nuestra nuera Vanessa.
Me considero una mujer sincera, sensible, empática, plena y muy feliz de poder servirle a la ciudadanía tapachulteca, también estoy muy orgullosa, y honrada, de ser la primera mujer gobernando mi querido Tapachula, por lo que tengo una gran responsabilidad de demostrar la capacidad, sensibilidad, honestidad y el compromiso de las mujeres en la administración pública.

Fotografía: Eder Ochoa.
MUA: Kathia Cruz.
Locación: Unión Juárez, Chiapas.

Además de ser presidenta de Tapachula, también eres una entregada madre de familia, ¿cómo balanceas tu trabajo con tu rol de mamá?
Incursionar en la política fue una decisión consensuada y desde entonces cuento con el apoyo y respaldo de mi familia. Este honroso cargo es de 24 horas, los 365 días del año, y mis familiares están conscientes. Sin embargo, no dejo de ser esposa, madre, abuela, hija, hermana, cuñada y amiga; por lo que busco encontrar tiempo para convivir, y para estar presente en los momentos más importantes y valiosos de cada miembro de la familia. Siempre he creído que un momento de calidad es mejor que horas de apatía. Duermo poco, pero cumplo con mi encomienda como presidenta municipal constitucional de Tapachula, tratando de tener tiempo para todo y para mi familia.
¿Qué valores fomentas con tu familia y cómo te gustaría que tus hijos te vean en un futuro?
Mi esposo y yo hemos inculcado muchos valores a nuestros hijos, y ahora procuramos inculcarlos también en nuestros nietos. Como familia, partimos de lo que consideramos el valor más importante: el amor; creemos que este valor es la base para otros valores, ya que una persona que ama es respetuosa, solidaria, empática, leal, incluyente y transparente. Una persona que ama generalmente es un buen ser humano. Quiero que mi familia, especialmente mis hijos y mis nietos, vean en mí a una mujer feliz, que todos los días trabaja responsable y honestamente para ayudar a otros. En cualquier espacio quiero dejar huella como una buena mujer, luchadora, aguerrida, comprometida, honesta, solidaria, sensible a las necesidades de otros, y con un corazón listo para todos.

¿Cuál es tu filosofía de trabajo?
Conocimiento y resultados. Es necesario conocer las carencias de la ciudadanía y, a partir de ahí, trabajar en acciones que resuelvan esas necesidades. Pero esto se basa principalmente en actuar con voluntad, compromiso, responsabilidad, honestidad, solidaridad, sensibilidad, trabajando con decisión, tesón e involucrando también el corazón.
A lo largo de tu mandato ha habido altas y bajas, pero, ¿qué ha significado para ti ser Presidenta Municipal Constitucional de Tapachula?
Ha sido un completo honor y una oportunidad muy especial de poder servir a la ciudadanía que me vio nacer, quienes decidieron darme la confianza para actuar en favor de ellos, de sumar al bienestar ciudadano, a su desarrollo, progreso y especialmente a la felicidad de todos, porque considero que el fin último del hombre es la búsqueda de su felicidad.
He sido una persona feliz, muy bendecida por Dios y la vida, y hoy, a través de mi cargo como presidenta municipal constitucional de Tapachula, tengo la oportunidad de devolverle a la vida lo mucho que me ha dado, de dar gracias a Dios a través del servicio a otros, en este caso mi querido Tapachula.
¿Cuáles fueron tus objetivos al inicio de tu mandato y qué has logrado solidificar hasta el momento?
Desde que inicié en la Administración Pública, primero como Regidora, después como Síndico y presidenta municipal sustituta, y actualmente como presidenta municipal constitucional, me propuse trabajar para el bienestar ciudadano y transformar mi querido municipio a través de la justicia social. Sin embargo, no ha sido una tarea fácil por el gran rezago social, la pandemia y por el tema de movilidad humana. Afortunadamente, hemos avanzamos notablemente en la obra de infraestructura (cerca de 2,300 calles pavimentadas, introducción de drenaje y alcantarillado, agua potable y ampliación de energía eléctrica). Así mismo, logramos aumentar la seguridad pública con mayor personal, equipamiento y capacitación; además de iluminar la ciudad a través del programa de alumbrado público “Brilla la Perla”. Continuamos trabajando arduamente para mejorar los servicios públicos y la imagen urbana de la ciudad; y también en materia de educación, cultura, igualdad de género, rescate de espacios públicos, consciencia ambiental, economía y turismo, entre otras áreas más.

¿En qué vas a concentrar tu trabajo en los próximos tres a seis meses?
Continuaremos con todas las acciones y programas mencionados anteriormente, pero, también, iniciamos con 2 nuevos proyectos: el programa “Chula y Sustentable”, que consiste en acciones para la ecología; y el programa “Somos Familia”, que es un trabajo en relación con la gestión de proyectos para obtener recursos de organismos internacionales en temas de movilidad humana.
¿Cómo ha sido tu relación con el pueblo de Tapachula? Y ¿Cuál ha sido el mayor aprendizaje que te has llevado hasta el momento?
Mi relación con los tapachultecos es de mucho cariño y respeto. Todos los días tengo de 8 a 10 actividades en campo, mi lema es: menos escritorio y más territorio. Actuar por el bienestar de todos es mi pasión, y el recibimiento del pueblo es la mejor recompensa y mi mayor motivo para seguir con este arduo trabajo.
El aprendizaje, hasta hoy, es que, en la medida de mi compromiso, mi lealtad al pueblo, mi trabajo y mi cariño a la ciudadanía, los resultados para el bienestar y la felicidad de los tapachultecos se irá alcanzando, por lo que busco que todas las aspiraciones y compromisos se conviertan en realidad. Y con eso, llegará la tan anhelada transformación de mi querido Tapachula.

En el ámbito personal, ¿qué proyectos tienes a futuro?
Por ahora mi compromiso y mi responsabilidad es con Tapachula, voy a seguir trabajando con el corazón todos los días para alcanzar todas las metas que nos propusimos. Pero, si a futuro, Dios, mi partido Morena y la ciudadanía, me dan la oportunidad de continuar sirviendo y trabajando por el bienestar de todos, aspiro a gobernar a Chiapas, y darle continuidad a la 4a. Transformación de nuestro Estado.
En tu opinión, ¿cuál es la condición de la mujer en la política y la administración pública?
Afortunadamente, en la actualidad las mujeres tenemos mayores oportunidades de ser parte de las decisiones importantes, de incursionar en la administración pública y de ser escuchadas. Luchamos por la igualdad de condiciones y de oportunidades, y estamos demostrando capacidad, entereza, compromiso, carácter y sensibilidad para gobernar y dar grandes resultados a la población más vulnerable. Como mujer te puedo decir, que ¡estoy lista para lo que venga!


¿Algo más que quisieras compartir con nuestros lectores?
Como primera mujer gobernando Tapachula, quiero invitar a todos y a todas, a luchar cada día para hacer realidad nuestros sueños. A trabajar en equipo para transformar nuestro Estado en un mejor lugar para vivir, desarrollándonos profesional y personalmente para conseguir el progreso y la dicha de todos. Y también, los invitó a actuar siempre con responsabilidad, honestidad, solidaridad, inclusión, con decisión, con tesón, involucrando siempre el corazón, para crear un entorno más pacífico y feliz para todos.