
Para los mexicanos el 10 de mayo es hablar de la fecha más importante del año después de la Navidad. Es celebrar a ese ser único y maravilloso de nuestras vidas; es festejar a mamá y agradecerle porque por ella somos y vivimos.
Ser mamá es un camino de conciencia. Desde el momento de la concepción sabemos que la crianza será un trabajo de tiempo completo por el resto de nuestras vidas, un camino lleno de retos y trabajo arduo a vencer día a día. A la fecha, el rol de madre ha cambiado en diversos aspectos y puede observarse a través de las generaciones de bisabuelas, abuelas y madres, que la forma de educar y criar es muy diferente a como era antes.
Sin importar la época, ser mamá es sin duda todo un reto, afortunadamente en la actualidad la mayoría de las madres tenemos acceso a distintas herramientas para realizar de la mejor manera esta ardua labor y poder disfrutar todo lo bello y maravilloso que te da el ser mamá.
“La cosa más pura en el mundo es el corazón de una madre, éste puede mover el universo, puede tener un efecto más allá de las limitaciones”.
-Yogui bhajan-
Las diversas disciplinas de ejercicio pueden ayudarnos a nosotras como madres a mejorar la calidad de tiempo que compartimos con nuestros seres queridos, y el yoga es una práctica que puede ser de mucha ayuda para las madres. Las enseñanzas y las posturas de yoga durante tu travesía por la maternidad, desde el embarazo y por el resto de tu vida te ayudarán a criar a tus hijos desde tu centro. Entendiendo que la maternidad es una labor de servicio completo no sólo para tu familia sino para la sociedad y el mundo al formar seres compasivos, conscientes, amorosos y saludables.
Nutrir el cuerpo, mente y espíritu es indispensable para conseguir el equilibrio perfecto entre ser mujeres, profesionistas, hijas, esposas y madres. Integrar la filosofía del yoga a la crianza es una labor cotidiana. Sin importar la etapa en la que te encuentras como mamá, ya sea que estés en gestación por primera, segunda o tercera vez, o si eres mamá joven o mamá mayor, siempre habrá una práctica que se adecúe a tu tiempo y edad, lo más importante es tomar consciencia de tu ser para poder desarrollar en las mejores condiciones tu rol.
Si aún no te has aventurado en el mundo del yoga y no sabes por dónde iniciar, te sugiero que comiences con suaves estiramientos acompañándolos de respiraciones profundas ya sea parada o sentada; en cada estiramiento realiza un par de respiraciones; posteriormente quédate sentada en una postura cómoda respirando un poco más profundo de lo normal tratando de calmar tu mente, poniendo atención a tu cuerpo y respiración. Esta es una forma de empezar a incursionarte en la meditación y si tienes la oportunidad opta por acudir a una sala de yoga o tomar clases personalizadas con un profesional certificado.
